
Escapada a Madrid – Patones de Arriba
Aunque nos habíamos informado sobre él, Patones de Arriba nos sorprendió mucho.
Un pueblo dividido en dos,
Patones de Arriba y Patones de Abajo.
Y es que, este pueblo situado en la Sierra de Madrid, es tan singular que no te lo puedes perder si pasas por la zona. Es tan especial, que merece la pena conocer un poco de su historia.
Se le puso el nombre de Patones por el apellido de sus fundadores, Patón. Se cree que el pueblo fue fundado en en 1527.
Perteneciente a la Villa de Uceda y bajo su jurisdicción, tuvo su propio Rey. En 1769, durante el reinado de Carlos III, logró su independencia.
Durante el Siglo XIX, los habitantes de este pueblo comenzaron a bajar hacia lo que hoy es Patones de Abajo.
Hoy en día, las casas del pueblo, en su mayoría, están destinadas a restaurantes, bares o comercios para el turismo.
¿Qué ver en Patones de Arriba?
No hay lugares que destaquen, por lo que el interés se centra en el conjunto del pueblo. Sus casas, sus calles, su lavadero y las vistas desde lo alto son lo que lo hacen único. No te pierdas ni una de sus empedradas callejuelas.
Las casas, realizadas con pizarra, tienen detalles increíbles y están perfectamente conservadas.
Pero, además, si te gusta el senderismo, encontrarás varios senderos que parten desde el mismo pueblo. Es una de las principales atracciones del lugar. En la oficina de turismo que hay nada más entrar, encontrarás toda la información.
Si te decides a visitar Patones de Arriba o hacer senderismo en la zona, tienes que saber que por la situación del pueblo, el aparcamiento es muy limitado.
En la entrada al pueblo, hay un pequeño aparcamiento, regulado, que se llena pronto. Por ello, si quieres aparcar arriba, tendrás que llegar pronto. Si llegas y encuentras que no hay donde aparcar, tendrás que hacerlo en Patones de Abajo y subir andando por un pequeño sendero.
Para comer o cenar, no tendrás problemas, el pueblo tiene varios restaurantes, aunque si vas en días que hay mucho turismo es mejor reservar con antelación.

