Recorrido por Cuba para 15 días
Nos hubiera gustado poder viajar por toda la isla, pero por los días que disponíamos tuvimos que centrarnos solo en una parte de la isla, así que este es nuestro recorrido por Cuba para 15 días.
La Habana
Como nuestro vuelo llegaba a La Habana, comenzamos nuestro recorrido por Cuba desde aquí.
El país tiene varios aeropuertos, pero los vuelos internacionales de gran distancia suelen llegar a La Habana o a Santiago de Cuba. Desde aquí te podrás desplazar a muchos lugares de la isla, pero en vuelos internos.
Si quieres saber las opciones que tienes para moverte por la isla, aquí te dejamos el enlace a nuestra pequeña guía sobre Cuba.
Los primeros dos días del viaje los dedicamos a La Habana. Esto nos sirvió para adaptarnos al ritmo y estilo de vida del país. Alojarnos en una casa con una familia cubana, nos ayudó a entender el funcionamiento del país, y a conocer algunos detalles que más tarde nos servirían.
Viñales
Tras recoger nuestro coche de alquiler (pincha aquí y encontrarás información sobre cómo alquilar un coche en Cuba y nuestra historia), nos dirigimos a Viñales, pasando por Pinar del Río.
En Viñales, nos costo un poco más encontrar alojamiento por dos razones, primero que es una zona muy turística donde todos los turistas nos concentramos en el mismo lugar, y segundo que por culpa de la empresa con la que alquilamos el coche llegamos muy tarde a buscar alojamiento.
En esta zona, hay varios lugares que visitar:
- Plantaciones de tabaco y café: lo habitual es hacer paseos a caballo para visitar alguna de las plantaciones. Nosotros preferimos no utilizar animales para actividades turísticas, así que por medio de las personas que nos alquilaron la casa, conseguimos un guía para hacer un recorrido a pie y fue maravilloso, porque pudimos hablar mucho con él y nos llevó a conocer a su familia, descubriendo como viven en el campo.
- Mural de la Prehistoria: esta obra artística está pintada sobre la piedra del mogote Pita Del Valle de Dos Hermanas y representa el proceso evolutivo de la vida de la zona.
Cayo Jutías
Desde Viñales, cogimos una carretera que se convirtió en camino de tierra, que nos llevó hasta Minas de Matahambre y Santa Lucia, donde la carretera volvió poco antes de llegar a Cayo Jutías.
Aquí encontramos una paradisíaca playa, sin apenas gente, donde disfrutamos de una increíble tarde, bañándonos en las cálidas aguas de color turquesa y, paseando entre manglares.
Para dormir volvimos a Viñales. En Cayo Jutías no hay ningún lugar donde alojarse, pero en las poblaciones que están antes de llegar hay varias casas particulares donde alojarse.
Playa larga (Bahía Cochinos)
Llegamos desde Viñales en medio de una gran tormenta y, conseguimos el mejor alojamiento de todo nuestro viaje. En la playa, una casa con un porche lleno de tranquilidad y con unas vistas insuperables.
En cuanto llegamos, la tormenta terminó y el sol salió con fuerza, a tiempo para darnos un baño en la preciosa playa.
Si te gusta bucear o hacer snorquel, esta es una buena zona. El precio de la inmersión es de 25 CUC. Hay dos playas de piedra, Cueva de los Peces y Punta Perdiz que, es de pago. Pero, a lo largo de la costa, encontraras varios puntos para bañarte. En esta zona el coral esta pegado a la costa y el agua esta repleta de peces de mil colores.
Además, en Cueva de los Peces hay un cenote de 70 metros de profundidad que, está conectado al mar mediante un túnel subterráneo, en el que también se puede bucear.
Cienfuegos
Tranquila y con poco turismo, en esta localidad podrás disfrutar de la pura vida cubana. Le llaman la Perla del Sur, tiene el segundo malecón más largo del país y su centro ha sido reconocido por la UNESCO.
Nos alojamos en Punta Gorda, una zona muy tranquila, perfecta para relajarse ubicada muy cerca del centro. En nuestra Guía de Cuba puedes encontrar donde nos alojamos, la casa era perfecta y los dueños encantadores.
El Nicho
Situado en la Sierra de Escambray y dentro del Parque Natural de Collantes, se encuentra este precioso lugar donde podrás bañarte en alguna de las muchas piscinas naturales que te ayudarán a llevar mejor el calor. Además, puedes realizar un pequeño paseo desde el que disfrutaras de unas increíbles vistas.
Para llegar a la cascada tienes que recorrer el sendero Reino de las Aguas. En el comienzo de la ruta hay un aparcamiento donde dejar el coche. Está vigilado y tendrás que pagar 5 CUC.
Trinidad
Todos los turistas que no encontramos en Cienfuegos los encontramos en Trinidad. En esta localidad encontrarás una gran oferta de alojamientos, pero cuidado, porque el precio puede subir mucho. No te quedes con el primero que encuentres, busca más opciones porque fuera de la zona turística encontraras mejores precios.
Pasear por sus calles adoquinadas es un placer. No te pierdas ni una de sus calles, fuera del centro encontrarás una ciudad más auténtica.
Además podrás escuchar música por sus calles y si te gusta bailar, encontrarás muchos lugares donde hacerlo.
Cayo Coco y Cayo Guillermo
Tras cruzar El Valle de los Ingenios, Patrimonio Mundial de la UNESCO, en el que todavía se pueden ver algunos ingenios azucareros del Siglo XIX, llegamos a Morón. Queríamos comer algo en esta ciudad, pero había un apagón de luz y tuvimos que seguir camino sin comer nada.
Aunque esta ciudad no es muy turística, te recomendamos que te des un paseo por sus calles donde podrás ver unas bonitas casas de intensos colores, con unas columnas muy bien conservadas.
Desde aquí, para llegar a los Cayos, hay que tomar una autopista que tiene un precio de 2 CUC, pero que merece la pena recorrerla. Además, si algo teníamos claro de nuestro recorrido por Cuba, era que queríamos visitar varios Cayos. La elección de los Cayos fue lo más difícil de toda la organización del viaje.
Teníamos pensado quedarnos una noche en un resort de todo incluido, pero descubrimos que había otro hotel muy diferente a estos y, tuvimos suerte que justo quedaba una cabaña para esa noche.
Esa tarde y la siguiente disfrutamos de las paradisíacas playas de ambos Cayos.
Cayo Coco es el cuarto islote más grande de Cuba y uno de los mayores destinos turísticos. Playa Larga, Playa Flamencos y Playa Las Coloradas son las más conocidas. Deja tiempo para acercarte a Playa Pilar en Cayo Guillermo, es una de las playas más bonitas que hemos visto nunca.
Caibarien
Necesitábamos un lugar para dormir de camino a Cayo Santa María y, acabamos en esta pequeña localidad, en una casa con vistas al mar y unos anfitriones encantadores.
Llegamos casi de noche, pero salimos a dar un paseo en busca de un punto de acceso a internet y así aprovechamos para ver el centro. Se trata de un pueblo de tradición pesquera, donde destaca la Plaza de la Libertad y el Malecón.
Remedios
Después de dormir en Caibarien, nuestro siguiente destino era Cayo Santa María, pero por problemas de salud tuvimos que cambiar el rumbo.
De camino a Santa Clara nos encontramos con Remedios, su centro histórico fue declarado Monumento Nacional en 1980. La Plaza Central tiene dos Iglesias y edificios de los Siglos XVIII y XIX, una preciosidad.
Esta visita no te llevará mucho tiempo y, sin duda, merece la pena.
Santa Clara
Llegamos tan preocupados por encontrar un médico, que el primer día no vimos nada. Nos reunimos con alguien a quien conocíamos, y pasamos la tarde visitando al médico y charlando.
Se puede decir que fue aquí donde entendimos y nos empapamos de la pura vida cubana. Hicimos cola para comprar pan, buscamos huevos sin mucho éxito, conocimos el funcionamiento de la cartilla de racionamiento, … Para nosotros algo muy entretenido y curioso, para ellos su rutina diaria.
Santa Clara, es una de las ciudades más alternativas de Cuba, llena de gente joven, de música y de monumentos dedicados al Che. Si quieres entender todo sobre la revolución cubana, este es el lugar perfecto.
Jovellanos
De camino a Varadero en nuestra ruta por Cuba, hicimos una pequeña parada en este auténtico y tranquilo pueblo.
Varadero
Llegamos a Varadero en busca de playas paradisiacas y, nos encontramos con playas llenas de hamacas y música. No era un indispensable en nuestro recorrido por Cuba, pero queríamos ver con nuestros propios ojos si las playas eran tan bonitas como habíamos oido.
Nos alejamos de lo turístico y encontramos un lugar tranquilo donde poder darnos un baño sin tanta gente y tanto ruido. La playa era tranquila, pero si tuviéramos que elegir nos quedaríamos con cualquiera de las que habíamos visitado en los Cayos.
En Varadero, encontrarás alternativas a los todo incluido para alojarte. Nosotros nos alojamos una casa particular en una localidad cercana, en Varadero estaban todas completas.
Matanzas
No nos cruzamos con ningún turista durante nuestra estancia en esta olvidada ciudad. Si bien no es una parada turística obligatoria, si tienes tiempo de sobra, hazle una pequeña visita.
Nosotros, en nuestro recorrido por Cuba, la utilizamos para dormir, pero ya que estábamos aprovechamos para hacer una visita rápida.
Playa Coral
Al igual que en Bahía Cochinos, nos encontramos con una playa de piedra, en la que nada más entrar al agua ya había coral. Éste era diferente, más oscuro que en la zona de Punta Pérdiz, y también estaba lleno de peces de colores.
La playa era muy tranquila, apenas había gente. Aquí aprovechamos para probar la langosta y la mejor piña colada del mundo. Mira que el señor que las vendía estuvo toda la mañana ofreciéndonos la piña colada, y menos mal que no la probamos antes, hubiéramos tenido que dormir en la misma playa.
Guanabo
Localidad turística por excelencia para los cubanos. Estaba de camino en nuestro recorrido por Cuba, así que hicimos una parada para dormir.
Mucha gente de La Habana, se acerca el fin de semana en busca de playa. Tiene un gran ambiente por lo que conviene reservar el alojamiento con antelación.
La Habana
Es curioso como después de estar en un lugar que era desconocido unos días atrás, y tras dejarlo para conocer nuevos lugares, al volver a este lo sientes como si estuvieses en casa. Y eso nos pasó con La Habana, después de estar unos días en ella junto a una familia que nos acogió tan bien, volver después de varios días de viaje nos hizo sentirnos como en casa y dejar de lado las inseguridades que te acompañan cuando sales a descubrir lo desconocido.
Y todo ello hizo que finalizáramos nuestro recorrido por Cuba con una pena enorme y con muchas ganas de volver a un país donde además de disfrutar de unos lugares increíblemente bellos conocimos a personas todavía mas maravillosas.